Hace unas semanas el Concejal radical Alfredo Guillén, en varias oportunidades y en distintos medios periodísticos cuestionó al Tribunal de Cuentas Municipal de Río Grande. El Edil manifestó que el “Tribunal de Cuentas no controla”, argumentando la falta de respuesta en tiempo y forma a distintos pedidos de informes. Los inconvenientes se generan por la falta de independencia, la falta de autonomía actual y la carencia de poderes sancionatorios o coercitivos del Tribunal. Y esta es una buena oportunidad para aclarar los porqués.
 
La autonomía del tribunal de cuentas fue cercenada mediante la ordenanza 2912/11 durante la gestión del intendente Jorge Martín, que contó con la firma del hoy Concejal Alfredo Guillén en su carácter de secretario de esa administración.
 
Desde el año 2014 existe en el Concejo Deliberante un proyecto para la modificación de esa Ordenanza. En ese proyecto justamente se propone la recuperación de la autonomía del Tribunal de Cuentas. Lo que el Concejo no aprueba el Tribunal no puede hacer, o sea, no puede controlar.
 
Si no hay sanciones o éstas son tardías (falta de control concomitante, entre otras atribuciones hoy ausentes) no hay riesgos de costos económicos para los funcionarios implicados como asimismo puede ser un portal de entrada para la corrupción.
 
Festejaríamos como Sindicato que el cuestionamiento al Control en Rio Grande por parte de legislador sea también el puntapié de inicio para discutir la estructura necesaria para el Máximo Organismo de Control de la Intendencia de Rio Grande, como así también del tratamiento del proyecto dormido desde el año 2014 para mejorar el Control, el reconocimiento de la indispensable independencia presupuestaria y a su vez adecuada para poder cumplir con la tarea, y contar con la estructura técnica necesaria para llevar adelante un control eficaz.
 
El Concejo Deliberante tiene la llave para poder dotar con las herramientas indispensables al Tribunal de Cuentas, con presupuesto y con una carrera administrativa y de personal que el trabajo técnico demanda. Matar al mensajero es una tarea simple que siempre se utiliza para no mostrar el bosque.